El Rincón del Trotamundos
La estación otoñal, es un buen momento para visitar la ciudad de Segovia, a decir verdad, Segovia posee tantos atractivos arquitectónicos y paisajísticos, que bien merece una visita en cualquier época del año, ya sea otoño, invierno, primavera o verano. Cualquier época es buena para disfrutar de esta hermosa ciudad castellana y deleitarse con sus nobles monumentos. Callejear por su trazado urbano de época medieval, y contemplar la urbe desde alguno de los miradores extramuros situados sobre las hoces de los ríos Eresma y Clamores.
En el año de 1985, la UNESCO incluyó en su catalogo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad, la ciudad de Segovia y su acueducto romano. Una declaración necesaria y muy acertada, pues la belleza de su enclave, su entorno natural, sus edificios históricos, y el trazado urbano, parece que fue determinante en una decisión transcendental para la conservación y la protección del patrimonio universal de esta ciudad castellana.
Segovia es una de la ciudades de la comunidad de Castilla y León, que posiblemente, mejor ha conservado su patrimonio histórico y monumental, al menos en lo que concierne a su casco histórico y entorno natural. Esta particularidad, permite al viajero disfrutar de uno de los conjuntos arquitectónicos de diferentes épocas y estilos, mejor protegidos de la comunidad castellana. Una arquitectura que apenas ha sufrido grandes transformaciones, como ha sucedido con otras ciudades, donde el patrimonio histórico ha sido diezmado por los especuladores.
Segovia es una ciudad relativamente pequeña, que se puede recorrer en pocas horas, pero, es una ciudad densa en contenido, ideal para disfrutar de su belleza durante un fin de semana. Un fin de semana es ideal para recorrer sus calles y plazas, adentrarse en sus museos, iglesias góticas y románicas, palacios y casonas noble, monasterios y edificios civiles que surgen por doquier.
Tiempo suficiente para disfrutar de uno de los monumentos mejor conservados de la antigua Roma, el Acueducto de Segovia, una bella y singular obra civil que desafía el tiempo y la gravedad de sus arcos esculpidos de sillares. La gran catedral gótica, otros de los monumentos más emblemáticos de la ciudad, junto con el alcázar y las antiguas murallas.
Para conocer la ciudad, proponemos una serie de rutas por el casco histórico, y algunas otras extramuros para que el viajero que visita Segovia elija aquellas que más le pueden interesar. Entre las rutas elegidas, las hay que discurren por el centro urbano, otras que combinan el casco antiguos con los parques y los márgenes del río. También una ruta por los miradores naturales que hay sobre las impresionantes hoces del río Eresma, que junto con el Clamores, circundan parte de la ciudad, dejándonos ver bellas panorámicas de Segovia.
Ruta 1. Esta ruta parte del acueducto y continua por la calle de Cervantes y calle Real, dos importantes arterías que discurren por el casco antiguo y que suelen estar muy concurridas. La Calle Real, nos muestra un interesante conjunto arquitectónico perteneciente a los siglos XV y XVI. La singular Casa de los Picos construida en los primeros años del siglo XVI. Más adelantes se encuentra la plaza de Medina del Campo, donde además del palacio de Los Tordesillas del siglo XV, el Torreón de Lozoya, de los siglos XIV y XVI, y algunas otras casas señoriales, esta la impresionante iglesia románica de San Martín edificada en el siglo XII.
Y llegamos a la plaza Mayor, centro neurálgico de la ciudad, donde, además de los típicos soportales y el Ayuntamiento, se encuentra la iglesia de San Miguel, ubicada con anterioridad en el centro de la plaza, tras el derrumbe parcial que sufrió, esta fié trasladada a un lateral. De estilo gótico, conserva elementos románicos pertenecientes al templo primitivo. Parece ser que en su atrio tuvo lugar en 1474 la proclamación de Isabel la Católica como Reina de Castilla.
En el otro extremo de la plaza, se encuentra la Catedral de estilo gótico tardío que comenzó a construirse en 1525. Esta sustituyó a la Catedral Vieja situada en los actuales jardines del Alcázar destruida en 1520 durante la Guerra de las Comunidades. Acercándonos ya al Alcázar nos encontramos con la iglesia de San Andrés construida en el siglo XII, con una estructura de tres naves y una cabecera con dos ábsides y una bella torre de ladrillo.
Al final de la calle, aparecen los jardines y la silueta del Alcázar de Segovia que se yergue sobre una roca aprisionado entre los ríos Eresma y Clamores, una de las edificaciones más emblemáticas de la ciudad. De su interior lo más destacado son los bellos artesonados que decoran los techos de algunos salones del castillo. Siguiendo el recorrido, nos encontramos con el barrio de las Canonjías, considerado este por los profanos, como uno de los conjuntos de arquitectura románica civil de Europa más importantes.
Y un poco más adelante, en el final de esta ruta, se encuentra la casa del poeta Antonio Machado donde vivió los años en los que estuvo dando clase en esta ciudad. La casa fue adquirida por la Academia de Historia y Arte de San Quirce, que la convirtió en una especie de museo del poeta.
Ruta 2. En su recorrido se puede visitar, entre otros monumentos, el barrio de la Judería situado en el valle del Clamores, pudiéndose visitar la Sinagoga Mayor, actual convento de Corpus Christi. También podemos recorrer las murallas que rodean la ciudad de Segovia con sus 2,5 m. de lienzos que nacen y mueren en el Alcázar en cuyos muros destaca la puerta de San Andrés, declarada Monumento Histórico-artístico en 1931. Las murallas que han llegado hasta nosotros se construyeron a finales del siglo XII y principios del XIII.
En esta ruta nos encontramos con el antiguo Museo Provincial de Bellas Artes. En su interior se encuentran obras procedentes de los conventos que fueron cerrados durante la Desamortización de Mendizábal, y algunos epígrafes romanos y medievales. También se puede contemplar la estilizada figura del alcázar, con su torre del homenaje, afilados torreones rematando el conjunto arquitectónico. En las murallas podemos ver la llamada puerta de Santiago, situada en la parte nortes.
Por último, en esta ruta esta situado uno de los barrios más singulares y bellos extramuros de la ciudad de Segovia, el de los Caballeros. Este núcleo acoge uno de los mejores conjunto de palacios de la ciudad: palacio de Quintanar del siglo XVI, Palacio del Conde Cheste, casa del marqués de Lozoya con portada románica, el Palacio del marqués de Castellanos y la Casa de las Cadenas del siglo XV. Además, en el barrio, podemos encontrar antiguas casa nobles que albergan museos, como el de Zuloaga y el de Esteban Vicente. El convento de San Martín, de Santo Domingo, San Esteban o San Juan de los Caballeros.
Ruta 3. La ciudad de Segovia conjuga a la perfección un rico Patrimonio Histórico-Cultural, con un extraordinario Patrimonio Natural. El viajeros que visita la ciudad, puede disfrutar de bellos y tranquilos paseos en plena naturaleza, a escasos metros del casco histórico, contemplar los abiertos páramos, los campos de cereal, y las cumbres de la sierra de Guadarrama cubiertas de nieve durante el final del otoño, en el invierno y parte de la primavera.
Esta ruta recorre el cinturón verde que rodea la ciudad de Segovia, situada sobre una roca caliza a unos 1.000 metros de altitud sobre el nivel del mar, circunvalada por dos ríos Eresma y Clamores. El recorrido es uno de los que más impresiona al viajero que visita a la ciudad de Segovia, especialmente si lo hace en otoño.
Durante el año, los bosques de hojas caducifolias que crecen en el curso del río Eresma, junto con aquellos que lo hacen en los parques y jardines, se visten con sus mejores colores, y como si de un lienzo impresionista se tratase, enmarcan el conjunto del paisaje en un hermoso cuadro lleno de luces, matices y colores.
Este cuadro deslumbra de forma muy especial, durante las primeras luces del alba y en los atardeceres, cuando la luz cálida acaricia las piedras de los nobles monumentos que yacen encaramados en lo alto del cerro rodeados por los lienzos milenarios de la muralla, los coloridos árboles, y el rojo de las hoces erosionadas por el río Eresma.
Durante el recorrido por esta ruta, que parte del acueducto, y combina la visita de los monumentos históricos y naturales, con los miradores naturales, podemos visitar algunos singulares parajes del río Eresma, donde se asientan antiguos molinos, restos del viejo puente y tranquilos remanso de agua. Por el camino encontramos el santuario de la virgen de la Fuencisla construido a finales del siglo XV. El monasterio de los Carmelitas, es un buen ejemplo de arquitectura del siglo XVII.
Camino de Zamarramala se halla la Iglesia de la Vera Cruz, fundada por los Caballeros de la Orden del Santo Sepulcro en 1208, aunque la tradición popular la atribuyendo a los Templarios. Los jardines del Romeral de San Marcos diseñados por el paisajista uruguayo Leandro Silva Delgado, un rincón donde relajarse y disfrutar del silencio que emana de este rincón de la naturaleza situado a los pies del Alcázar.
En la ruta se encuentra también la Real Casa de Moneda, está considerada uno de los ejemplos más antiguos e importantes del Patrimonio Industrial de Segovia. Se trata de uno de los pocos edificios del siglo XVI que ha llegado intacto hasta nuestros días. Fue construido por el arquitecto Juan de Herrera para Felipe II.
Antes de visita el Monasterio del Parral, podemos deleitarnos con los colores del otoño en la Alameda del Parral, una de las zonas más bellas del cinturón natural de Segovia, que transcurre junto al río Eresma, lugar de sosiego, de paseos y de románticos amores que se prometen la felicidad eterna.
El Monasterio de El Parral, un fantástico conjunto arquitectónico y natural, mandado construir en 1447, por Enrique IV. Es un complejo de edificaciones distribuidas en torno a varios claustros, góticos, mudéjares y platerescos. Abandonado en 1836 tras la Desamortización de Mendizábal, fue reconstruido al ser declarado en 1914 Monumento Nacional. San Vicente el Real, del siglos XII-XVII, es el monasterio más antiguo de la ciudad de Segovia, en él año 919 ya se había construido el templo dedicado a San Vicente. En su interior se conservan algunos sepulcros tallados en alabastro.
Esta parte de la ciudad es algo desconocida, pero goza de una belleza natural e histórica de gran valor que el viajero sabrá apreciar en toda su plenitud en el momento de su recorrido. Esta ruta confluye con la senda de los molinos, une paisaje, naturaleza, geología e historia industrial de la ciudad de Segovia.
Para los que gustan de caminar, deben tomar los pequeños senderos que salen de la ruta principal y suben hasta los miradores naturales, desde los que se tiene unas panorámicas excepcionales de la ciudad de Segovia, sus monumentos, y de su cinturón natural.
La ciudad de Segovia, un destino casi obligado para los viajero y trotamundos que gustan de conocer el patrimonio histórico, arquitectónico y cultural de España. Segovia puede ser también, el lugar de partida para realizar otras rutas de interés por la provincia; los jardines y palacios de La Granja de San Ildefonso, situados en las estribaciones de la sierra de Guadarrama. No lejos de Segovia se encuentra la ciudad de Sepúlveda y el Parque Natural de las Hoces del Río Duratón, un enclave natural y paisajistico de gran belleza.
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