El Rincón del Trotamundos. Pepe Acera
Recorrido… Refugio de Collado Jermoso/Refugio de Ramón Lueje. Kms… 16.Tiempo invertido… 9 h. Ascenso positivo/negativo… 930/980. Clima… soleado. Dejamos atrás Jermoso, la mañana es fresca, pero no tanto como el baño de la noche en la fuente haciendo equilibrio en las piedras… nos acercamos a las Colladinas nos despedimos del Friero, y nos esperan los rebecos pasada la Collada Ancha, después pedrería interminable y a Tiros Casares.
El día va tranquilo y entretenido solo pensando que Jose Angel que esta mañana decidió bajar por donde ayer subimos para recuperarse de la mala elección de zapatillas, va a perder, se está perdiendo, una jornada sorprendente.
Caos continuo y laberinto de Lapiaces que nos deja en Cabaña Verónica, desde luego la maestría de Pablo aquí es más que palpable, hace fácil, tranquilo y seguro lo que para nosotros sin estar habituados al terreno sería complicado y de larga dedicación en tiempo, Sergio el guarda del cascarón no está, en su lugar tenemos a un inglés muy amable que nos invita a un café…
hace 55 años se trasladó desde astilleros de Santander la cúpula de un portaaviones americano, deseo del ingeniero que consiguió con mucho empeño hacerlo y darle el nombre de su hija, Verónica, el nombre del escueto y brillante refugio, El Tesorero, Horcados
Rojos, Santa Ana y Peña Vieja es la vista que saboreamos mientras tomamos algo y charlamos con los granainos, gentes de Sierra Nevada que vienen a probar la caliza, ya coincidimos ayer en Jermoso, y no ocurrió en Vegabaño, por un pequeño percance que sufrieron….
Seguidamente la bajada del cable al Jou los Boches, más camino lunar y hasta el Jou sin Terre. (por cierto, el cable de Horcados Rojos como siempre, mejor no tocarlo). Después de comer y descansar un rato llegamos al Picu el emblema de Picos de Europa, breve charla con Tomás el guarda del Refugio Vega de Urriellu y arrancando que tenemos que continuar nuestro camino dirección oeste.
Corona el Raso a través de la Brecha de los Cazadores y de allí a Horcada Arenero, desde donde se ve la Pardida, accesible andando, el Neverón de Urriellu, sin mucha dificultad tampoco y Torrecerredo la cumbre mas alta del macizo, se hace de rogar el Refugio J. Ramón Lueje o de Cabrones pero por fin llega y con él la vista de Dobresengos, el collado y los Cuetos del Travé.
Ya en el refugio de Tomás encontramos el verdadero alma de la montaña y el montañero, austeridad, frío, ambiente perpetuo y poca gente, es el «refugio», autentico y con sabor. Tres hubo que levantar para conseguir el edificio actual, los antecesores fueron derribados por el viento, la montaña y la cabezonería del hombre, al final la naturaleza se impuso, aprendimos la lección y hoy tenemos ante nosotros la guarida mejor escondida de Picos. ¡Bienvenidos al refugio de Cabrones!…y este Jose Angel sin aparecer…
