Texto y Fotografía de Juan José Ramos Encalado
El inmenso volcán Mauna Kea, situado en la Big Island del archipiélago de las islas Hawaii, con sus 4.137 metros es el techo de las montañas que existen en la multitud de islas del Océano Pacífico. Es una montaña sin relieve formado por un levantamiento del suelo, simplemente la presión del magma comba el horizonte, y la única sensación de altitud viene dada por la rala vegetación, el frío y el aire enrarecido.
Las marchas de montaña resultan impresionantes por las grandes dimensiones y distancias pero un tanto monótonas ya que como he dicho anteriormente no hay relieves. El hecho de estar cerca del ecuador, hizo que el glaciarismo, transformador del paisaje, apenas haya actuado, por lo tanto lo único que rompe la monotonía son algunos conos de cenizas y alguna colada de lava más o menos reciente.
