La desnudez nos deja ver los inquilinos del árbol

El Rincón del Trotamundos. Roberto Bueno Hernández. 2/12/2013

El otoño desviste el bosque y lo deja en ropa interior. Cubiertos de líquenes, los castaños sólo se adornan con los erizos que aún no han caído. En un paseo otoñal por la Sierra de Béjar, el hábil ojo del artista que me acompañaba, mi padre, se fijó en ellos. Con una focal larga, yo sólo tuve que buscar el encuadre adecuado para acercarme a la intimidad del bosque.

Datos de la toma: Cámara Nikon D300; objetivo Nikkor 70-200 mm. f: 2,8 a f:13 y 1/8 seg. ISO 200 y trípode Manfrotto.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.