Viaje al pasado por Bretaña y Normandía

El Trotamundos. Jose Luis Pina, 10/9/2011

Bueno, pues eso, se acabó lo bueno y ya a empezar a pensar en las vacaciones del año que viene. Por el norte de Francia muy bien, aunque todo súper caro (1 café 4 €), así casi todo. Tanto Normandía como Bretaña son impresionantes, con paisajes muy distintos. A pesar del tiempo, que algunos días fue lluvioso y frío, por lo demás muy bien.

Empezamos viendo la famosa duna de Pyla y de ahí subimos hacia Normandía por el Valle del Sena y a la costa. Playas encantadoras y pueblos aún más. Estuvimos en un pueblo que está como lo dejaron los alemanes cuando lo bombardearon y es realmente impresionante, con todas sus ruinas y sus coches de esa época quemados y todo oxidados. Lo tienen como museo de la memoria histórica.

De ahí pasamos a las playas donde se produjo el desembarco en la segunda guerra mundial y también en el cementerio americano. Coincidimos con el toque de oración que hacen todos los días al atardecer y la verdad, es sobrecogedor oírlo en un lugar que hay 9836 cruces de los soldados que murieron en el desembarco de Normandía.

Continuamos por Mont Sant Michel, tanto de día como de noches, pues nos apagaron hasta las luces y tuvimos que bajas casi a oscuras. Después Sant Malo, ciudad reconstruida después de arrasarla las tropas alemanas. Continuamos por la costa del Alabastro, cuyos acantilados blancos son impresionantes.

Después pasamos a Bretaña, en donde los pueblo son similares y donde el tiempo nos da una tregua. Aquí visitamos lugares como la costa del granito rosa, con el curioso faro de Ploumanach e infinidad de puntas y faros por doquier.

También estuvimos en la Punta del Finisterre de Francia en donde está el Km. 0 del camino de Santiago francés. Visitamos varios castillos que son muy distintos a los de España. Son grandes mansiones y palacios que casi todos son privados.