7 DESIERTOS CON UN PAR DE RUEDAS

Un libro de Sergio Fernández Tolosa, publicado por Saga editorial

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Este libro de gran formato narra la extraordinaria aventura protagonizada por Sergio, quien ha atravesado durante cuatro años los siete mayores desiertos del mundo en bicicleta de montaña y en solitario.
Gracias a su relato en primera persona, el lector experimenta la soledad del outback australiano, descubre la tierra de nadie entre Chile y Bolivia, se maravilla ante las floraciones en el Mojave y participa en el salvamento de una cría de elefante en Namib. Comprende lo que significa dormir bajo las estrellas en medio del Kalahari, conoce a los nómadas mongoles del Gobi y sigue las huellas de las caravanas trans-saharianas que atraviesan durante semanas el mas duro de los desierto.

Durante los más de 30.000 kilómetros sobre la bicicleta, Sergio Fernández Tolosa, trascendió el mero reto deportivo hasta completar un luminoso viaje iniciático en unos territorios que no son sólo arenales yermos, sino bellos lugares llenos de vida. Este hermoso libro, se presenta en una magnífica y cuidada edición que incluye cientos de impresionantes fotografías tomadas por el propio autor, en las que se puede apreciar la magnitud de estos desérticos territorios.
Apasionante crónica, de una odisea tan exigente física y mentalmente como enriquecedora desde el punto de vista humano. Testimonios de culturas ancestrales con mucho que enseñar en un planeta amenazado por la desertización y la escaseé de recursos. Sorprendentes encuentros con las milagrosas formas de vida que subsisten en las zonas más áridas del planeta.
Un libro que demuestra que los desiertos son mucho más que meros espacios vacíos y sin vida, cubiertos de arena, donde solo se escucha el viento calido del sur que sopla cada día que borra la huella de todo ser viviente, y un paisaje que cambia de la noche al día. En cada metro cuadrado de aparente arena, hay todo un mundo de vida difícil de apreciar a simple vista para todo aquel visitante que pase de prisa sin detenerse a contemplar y a escuchar los latidos y sonidos de la ardiente arena.

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