La ascensión al pico Gilbo, una cuesta de vaca
Autor: Pina y Chuchi

Los Pina’s Boys, en una “hazaña sin precedente” y después de una larga y dura travesía, por impenetrables hayedos, Jous y una dura, durísima ascensión, que les lleva por erosionadas paredes calizas, aéreas aristas, venteadas colladas y fuertes pendientes, alcanzan la mítica cima del Gilbo, el pequeño Cervino de la montaña de Riaño.
El pasado fin de semana, nos fuimos a las tierras leonesas de Riaño para aprovechar que ya por fin parece que empieza el buen tiempo y disfrutar de la larga primavera, en este año tan extraño, en el que la naturaleza esta que se sale de flores y de verde, como hace años que no se conocía.
Con alguna pequeña anécdota acaecida en el refugio, pero por lo demás un estupendo fin de semana, con una preciosa subida al Gilbo, (el Cervino de Riaño) que tan bonita figura tiene desde el pueblo, con una aérea arista sin demasiada complicaciones y al final la bajada por otra herbosas variante, haciendo una travesía circular muy interesante que descubre solitarios parajes. Bosque de hayas, merendola a lo orilla del embalse de Riaño, y bajada al pueblo entre floresta, gamones, orquídeas y demás especies de la flora cantábrica. Otro fin de semana más de Pandora y viaje, disfrutando de la naturaleza y la montaña en el norte peninsular, comiendo bien y bebiendo con moderación.
