Perú, rumbo al Chamonix de los Andes

Manuel Santervás Martín: 11-8-2011

Ya estamos en Huaraz, casi perdemos el vuelo de Cuzco a Lima, luego el viaje en autobús a Huaraz fue mejor de lo esperado. Son ocho horas para 400 km y se pasa un puerto de 4100 m, y has partido de Lima a nivel del mar… lo mejor para aclimatarse a la altura. El autobús tiene «aeromoza» y te sirven comidas y bebidas como si fuera un avión, de hecho, tiene dos pisos y los asientos se convierten en camas al reclinarse. Dos películas, que si mira que alto vamos…no se hizo largo.

A Huaraz lo llaman el Chamonix de los Andes, sin ánimo de ofender a nadie, Chamonix es mil veces más bonito que Huaraz… sí que está rodeado de altos nevados y por sus calles bulle gente con pinta de montañero, pero está a media asfaltar, lleno de polvo, muchas fachadas sin recubrir, muchas casas sin terminar…con el tiempo podrá compararse, hoy no.

Quedamos con nuestro guía para el treking del Huayhuash hoy a las 7.30 para hacer una pequeña marcha de aclimatación a la laguna Churup (4450 m. así de broma). Desayunamos en una juguería en frente del hotel y en un taxi nos fuimos al caserío de Yupa donde empieza la marcha.

Son mil metros de desnivel por una pista al principio y luego siguiendo una morrena, ya dentro del parque nacional Huascarán. Para llegar a la laguna hay que trepar unos cincuenta metros muy fáciles pero que cuestan algo con la altura a la que estamos. Llegamos bien, el sitio un espectáculo, comemos, charlamos sobre cómo irá el treking y bajamos tranquilamente.

No hemos tenido ningún problema con la altura al ir subiendo poco a poco y beber bastante, mañana empezamos la aventura en Huayhuash, doce días y muchos metros que subir, tras cenar pronto a la cama pues toca preparar temprano los petates.

Según nos ha contado el guía seremos siete: dos arrieros, el cocinero, el guía y nosotros tres, y unos siete u ocho burros o mulas. Promete la experiencia.