El Rincón del Trotamundos.
Oleajes de roca inundan el camino, la soledad y el silencio de las columnas de granito, las caprichosas formas esculpidas por el tiempo y las contradicciones de los elementos que se necesitan mutuamente al tiempo que se repelen, entablando en cada momento, feroces batallas cuando uno de ellos se enfurece. El resultado de todo ello, es un paisaje descompuesto, tenebroso y amenazante, a la vez que nos deleita con su serena belleza y sutil armonía, pues todos los elementos de este paisaje, guardan un perfecto equilibrio entre si, lo que hace que nada falte y nada sobre.
Un mundo de ecos, misterios y sueños, algunos cumplidos y otros frustrados, donde solo el hombre y la cabra montes, desafían, día y noche, su pétrea gravedad. Galayos es un cuadro en bruto finamente dibujado por el tiempo, donde la música del viento nos deleita con bellas melodías y sutiles sonidos que se elevan hacia el cielo. En la contemplación en silencio de este cuadro, el tiempo pasa lento, mientras nuestro cerebro viaja a una gran velocidad recorriendo otros paisajes, nuestro interior y nuestros sueños, buscando con añoranza cuantos caminos hemos hollado en nuestra vida, solos o en compañía de buenos amigos.
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