El Rincón del Trotamundos. 31/12/2011
Te vas como viviste, exuberante, bella, rodeada de color y de hermosura, siendo la reina del jardín del edén, de las miradas furtivas, de las caricias del viento y de los aromas que sobre tu trasparente textura esparcían tus semejantes, querían conquistar tus sonrisas, tus besos, tus caricias y tu sensuales atractivos.
Te vas y nos dejas en un jardín del edén que muere lentamente sumido en las tinieblas de un futuro incierto, de un camino por descubrir, de una ambición desmedida. De unos sueños trucados, de unos compromisos que pesan como losas sobre nuestro débil esqueleto, sobre nuestra mente confusa y sobre los fantasmas que recorren el mundo globalizado.
