El Rincón del Trotamundos. Pepe Acera
Recorrido… Boca de Huérgano/ Cangas de Onís. Kms. 74. Ascenso positivo/negativo… 450/1150. Clima… nuboso, frío. Una mañana agradable saliendo de Boca de Huérgano camino de Riaño, el sol nos acompaña y nos invita a acercarnos al pueblo nuevo, la iglesia contiene la espadaña de la que hoy yace bajo las aguas del embalse…
Toca dirección al puerto del Pontón y en el primer requiebro a norte el viento se nos pone de cara, no importa, es una mañana de montaña, día gris, nuboso y centrado, la mezcla perfecta para ir ganando metros disfrutando de los caprichos de la naturaleza.
Arriba en el collado, las cosas lejos de mejorar, empeoran, pues el frío se aúna al resto de los fenómenos y como toca larga, pero larga bajada, empezamos a notar la falta de ropa de abrigo. Si, el bosque de hayedos que inunda la carretera en ambos lado nos distrae mientras nos muestra desencajadas formas entre distintas densidades de tono. Todo ello no hace más que entretenernos, pero el frío continua apoderándose de nosotros hasta que por fin nos encontramos con Oseja de Sajambre, y además, nos flanquea su entrada con sendos bares con comedor!!
Nos apresuramos a entrar y pedir un caldo, … «demasiado pronto, aún es verano ??aunque eso si, con frío, pero si queréis unas alubias pintas, rollos de bonito de segundo, huevos con chorizo frito de tercero y tarta de queso de cuarto «… pues no se hable más!!.
Y así después de una larga tertulia con la dueña, persona encantadora, proactiva y sin faltarle una sonrisa en todo momento, posiblemente porque la vida le enseñó hace unos años, que lo más gratificante para ella no se lo iba a dar nada superficial y efímero como día a día nos muestra un supuesto mundo ideal, desorden, consumo e idolatría se vaya por donde se vaya…ella, en su hijo, iba a encontrar una razón para sonreír siempre. Gracias por la lección de lucha y de coraje.
Pero tenemos que seguir, sólo es dejarnos caer, llevamos el Sella a nuestro lado y así hasta Cangas de Onís, friolera de unos 45 kilómetros de bajada, aunque hicimos una parada a la altura de Vidosa, en el puente, sorprendidos por las vías ferratas, puentes colgantes y tirolinas que conforman un centro de multiaventura.
Ya en Cangas de Onís con parada obligada en el puente romano, buscamos donde descansar, cenar poco y pensar en la siguiente etapa.
