El Rincón del Trotamundos. Refugio de Riaño. 6/5/2013
Como dicen los amigos del Refugio de Riaño, el invierno ha sido largo y duro, prolongándose más de lo que es habitual, pero según parece el oso pardo que habita en las montañas de la Cordillera Cantabria, ha resistido los rigores de la naturaleza y con la entrada de la primavera ha salido de su guarida y se dejar ver por los bosques y montes de la cordillera, alimentándose con los tiernos tallos que brotan por doquier.
Una hermosas estampa de la naturaleza que pocos tienen la suerte de contemplar, aunque con un poco de suerte y con el esfuerzo de todos, pronto, la observación de estos animales que estuvieron al borde de la extinción, pueda ser algo habitual entre quienes gustan de pasear por los bosques y montañas del norte peninsular y disfrutar de la belleza que depara la naturaleza salvaje.
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