Muere Steve Jobs, el fundador de Apple

 

El hombre que revolucionó la tecnología y las comunicaciones

El Trotamundo. 6/10/2011

Hace ya casi 20 años que decidí aparcar la máquina de escribir y comprarme un ordenador para escribir y maquetar mis trabajos. En ese momento, sin saberlo ni esperarlo, me encontré en medio de una batalla dialéctica, dos de mis amigos que por entonces ya tenían ordenador, se disputaban la idea de cuál de los dos sistemas informáticos era mejor, el Windows o el Mac. Tras muchas y acaloradas discusiones, y valoraciones por mi parte, concluí que para una persona poco instruida en la informática y en estas máquinas, lo mejor era comprarse un Mac.

Fue así como entre en el mundo de los Mac y entre en contacto por primera vez con estas máquinas, concretamente con el LCII, un aparato fantástico según mi parecer, aunque muy pronto fue sustituido por el imac. Ambos cacharros los conservo hoy y me siguen pareciendo una maravilla, especialmente el imac que después de 10 años, aun funciona perfectamente.

 

En este sentido no se cumplió la premisa de una amiga, que nada más comprar el primer Mac, me dijo, los ordenadores Mac están condenados a desaparecer porque nadie puede, salvo los técnicos, meter mano en su interior. Creo que por suerte, el tiempo no le dio la razón, espero que haya acertado más en su vida que con el futuro  de los Mac.

 

Dicho todo esto, hoy hemos tenido la triste noticia de la muerte de Jobs, el gran inventor de estas maravillosas máquinas que han revolucionado el mundo y han acercado la informática y la telefonía, tal como la conocemos hoy, a la gente de la calle. Algunos han dicho de él que su genio es comparado con los grandes descubridores, Galileo, Einstein… que cambiaron el curso de la historia, yo no diría tanto, si bien es cierto que si no fuera por los mac y su fantástico sistema operativo, el mundo de hoy no sería igual. Y a diferencia de aquellos pensadores, jobs no ha muerto en la miseria, y por suerte, torturado y condenado a la hoguera por la inquisición, sino nadando en la abundancia.

 

Fue un monstruo del capitalismo, que como otros muchos monstruos de este inhumano sistema social, supo inventar cosas que han ayudado al hombre a mejorar su vida diaria, y a otros, como en su caso, a enriquecerse. Acercó la informática como nadie al hombre que no era experto en esta materia, invento aparatos de irresistible belleza, y fomentó el consumismo de masas hasta límites insospechados.

 

Los productos Apple, además de prácticos, fáciles de manejar y eficientes, han cautivado al mundo y han triunfado en todo el planeta entre las gente que se los podía comprar ya que la mayoría de ellos tienen un alto precio. Y no solo han triunfado, también han sido, en estos últimos 20 años, un poderoso contrapeso para contener el poderío del gigante de Windows. Si no hubiera sido por Apple, hoy estaríamos, a nivel informático, poco más que en la edad de piedra.

Pero no todo lo que hizo este carismático personaje del siglo XX y su empresa Apple, fue tan brillante como para situarle entre los grandes descubridores, pues como ya hemos comentado, ha muerto nadando en la abundancia y sepultado por dinero. Pero como todos los millonarios, lo hizo a costa de esquilmar los recurso naturales de la tierra, olvidándose del medio ambiente, el necesario equilibro entre los recursos limitados con los que cuenta el planeta Tierra y el consumo, y lo que es peor, explotando de forma salvaje y vergonzante, por un miserable salario, a miles de empleados que repartidos por todo el mundo, fabrican los productos de Apple.

Un legado que pesará sobra Steve Jobs como una losa, lo que no guarda comparación con otros pensadores y descubridores que le precedieron, y que con sus descubrimientos cambiaron el curso de la historia de la humanidad, ello por más que ahora digan de él los que hace años le denigraron.

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